El Periscopio Indiscreto

Érase una vez, un bosque bellísimo, con muchos McDoanlds, telepizzas, fnacs y Media Marks de todos los colores que alegraban la vista de todos los niños que paseaban por ahí. Todas las tardes los animales que habitaban el bosque, quedaban a las cinco en la puerta del cine para que el anciano les contase las historias más aburridas.

-Últimamente son una... los cuentos que nos cuenta el viejo de... este -decía el conejo-

-Tienes razón, vayamos a jugar a las máquinas -decía el ciervo- Dejando sólo al anciano.

Los animales apostaban quien llegaría primero si el conejo Duracell o Energizer. Las hormigas corrían presas del miedo, los niños las perseguían con lupas, mientras una especie de luz abrasadora las iba quemando. Los pájaros conversaban con las mariposas mientras las serpientes le echaban ojo algún pájaro Don Juan.

Pero... Un día, los animales del bosque escucharon unos roíos, pasos extraños y música chunda chunda y se asustaron muchísimo, porque la tierra comenzaba a temblar.

-El Apocalipsis. Gritaba la Zorra.
-No... Tranquila... no es el Apocalipsis -decía el Perro mientras intentaba terminar-

De las sombras apareció Chimo Bayo que era un viejo DJ, malo y feo, que pinchaba música en la discoteca abandonada "Puzzle", por eso no tenía amigos ni familiares, tenía la cara muy triste y angustiada, no le quedaban más flyers para repartir y por eso no quería que nadie fuese feliz... Cuando escucho la risa de los niños que perseguían a las pobres hormigas y los pájaros hablaban por hablar, se enfureció de tal manera que canto su mítica canción y fue detrás de ellos.

Rápidamente, tocó con su disco de vinilo de Front 242 el árbol donde estaban sentados los pájaros, y este, después de varios minutos, empezó a quedarse calvo, las hojas caían de tal manera que los pájaros se convirtieron en hojas también y luego perdió el color verde pino. Lo mismo hizo con las flores, el césped donde estaban comiendo los ciervos, los pobres se quedaron sin comida y poco a poco fueron muriendo de inanición. Después de hacer su gran maldad, se fue riendo, y mientras lo hacía repetía:

-Esta sí, esta no. Chiquitan chiquititan tan tan. Esta sí que tun pan pan que tun pan que tepe tepe. Esta no pan pan que tun pan que pin.

Pasaron varios años desde que sólo entraban tunantes al bosque, hasta que una paloma llegó volando y cantando alegremente, hasta que sin querer silbó la canción que sonaba a todo volumen. Se quedo flipada la pobre paloma que vio como la discoteca "Puzzle" estaba a rebosar de gambiteros.

-Qué paso aquí... se preguntaba. Todos perdieron su color y movimiento. Esta muy tenebroso como si fuese de noche. Tengo que hacer algo para que todo este bosque sea como antes... ¿Qué puedo hacer? Y después de meditar un rato dijo: ¡Ya sé!

La paloma se posó en la rama de un árbol y empezó a truñar los coches tuneados, pero al ver que había tantos llamo a todos sus amigos que venían de filmar una película de Hitchcock, y comenzaron y terminaron su asquerosa tarea. y como por arte de magia "Puzzle" se volvió a cerrar. El bosque retomo su color, pero con un cierto aroma no muy agradable.

Al bosque se le devolvió la vida, pero ya no era lo mismo que antes, ya no había tranquilidad y serenidad, la paloma trajo consigo especies de otros lugares y con necesidades que los animales que vivían en el bosque no necesitaban.
Abrieron nuevos restaurantes de comida rápida, supermercados, tiendas de ropa, surgieron modas nuevas como hacerse piercings y tatuajes. Ikea también abrió una tienda en el bosque e incluso una óptica.